Desde el comienzo de la guerra, Coopera ha trabajado para garantizar asistencia y protección a la población ucraniana víctima de la guerra en Kiev, en las regiones de Ivano-Frankivsk y Zakarpattia mediante cobertura de necesidades básicas y la atención psicológica para paliar el impacto del conflicto en población desplazada y comunidades de acogida. Los principales beneficiarios serán familias monoparentales principalmente encabezadas por mujeres solas con hijos a cargo, las personas mayores, enfermos crónicos y los heridos de guerra.
El proyecto consta de varias fases:
Envío de generadores para garantizar electricidad a dos hospitales y centros médicos de las zonas en las que se trabajara.
Se garantizará el acceso a una vivienda y ayudas económicas a las familias ucranianas. De hecho, de los 7 millones de desplazados, el 75% de las familias viven hacinadas en una habitación, sin ninguna ayuda para el alquiler ni trabajo posible. Se entregarán ayudas a 200 familias para que puedan pagar un alquiler durante un año y mejorar sus condiciones de habitabilidad dignamente.
Se pondrá en marcha una solución piloto al problema habitacional y se diseñará un modelo de refugio unifamiliar a bajo coste, con materiales locales y sostenible, formando a personas locales para su fabricación.
Asimismo para paliar los efectos del frio invierno y teniendo en cuenta la escasez de recursos, la falta de calefacciones comunitarias y el elevado coste del gas, en la ciudad de Kiev se fabricarán estufas eléctricas de bajo consumo y se distribuirán a 1.000 familias. Esta intervención no tendrá ningún impacto negativo sobre el medioambiente.
Los aparatos que se producirán para calefacción serán eléctricos y el prototipo de refugio unifamiliar se diseñará en virtud de los medios locales y será ambientalmente sostenible.
Otro objetivo que se va a desarrollar es la puesta a disposición de medios de transporte, medios de transporte para mejorar el traslado de ayuda humanitaria y enfermos. Este objetivo surgió tras del bombardeo del aeropuerto de Ivano-Frankivsk, después de que comunidades religiosas con las que se está trabajando en este proyecto, optaran por trasladarse a la provincia de Zakarpattia y desde donde comenzaron un trabajo de reparto de alimentos a los civiles ucranianos desplazados de sus hogares. Para ello las religiosas consiguieron la donación de vehículos para llevar ayuda al este ucraniano.
En estos momentos se requiere la reparación de estos vehículos para la distribución de productos de primera necesidad y medicamentos, así como sumar dos nuevas furgonetas mixtas de segunda mano, que puedan trasladar a heridos y enfermos a los puestos de salud así como alimentos.
También se adquirirán neveras que irán en los vehículos para el transporte de medicinas que necesitan frío como la insulina.
Resumen de los objetivos
- Construcción de una vivienda unifamiliar;
- Generadores eléctrico para hospitales y centros médicos
- Arreglo de coches, compra 2 furgonetas para distribuir ayuda humanitaria y transportar enfermos.
Este proyecto esta financiado por el Ayuntamiento de Madrid en alianza con ONG Rescate
Capital financiado: 436.000 Euros
Tiempo de ejecución: 12 meses